
Una película animada no infantil. Se propone transmitir una creativa historia que cuenta la amistad mediante cartas, entre una nena australiana de nueve años y un cuarentón, obeso y desentendido de la sociedad, instalado en su departamento de nueva york. Pasan años envíandose cartas, divagando siempre con concretar de una vez por todas su encuentro. Las cartas de Mary logran sacar totalmente de quicio a Max, y lo ayudan con su psicosis. Max, por su parte, acompaña a Mary en su crecimiento, y contesta mucha de sus duda -aunque erroneamente-.
Me encantó porque es fresca, te transmite un mensaje hermoso, y me fascina como está hecha. Una de mis peliculas favoritas, sin duda.